miércoles, 4 de julio de 2018

Poesía


Veo hacia el cielo y contemplo las nubes
que como espumas blancas se explayan en el cielo;
escucho los pájaros y aunque cantan,
percibo un silencio que hace presencia
de alguien que me está mirando.
Siento el viento
y percibo la lira que toca las cuerdas de mi alma
me entrapa el agua y siento la vida
que expele mis pulmones
y toca lo más hondo de mi ser.

John Henry y la posibilidad de un mundo mejor.

Gary Mckinnon es un hacker inglés que ingresó en un programa secreto del gobierno de los Estados Unidos llamado “Solar Warden”, gracias a que pudo acceder a la red informática de las computadoras del Pentágono.

Esto causó tal descontento en el gobierno de los Estados Unidos, que fue pedido en extradición al gobierno británico y posiblemente recibiría una condena de 70 años de prisión, por lo cual se le inició un proceso legal en el Reino Unido y últimamente decidieron que no podía ser extraditado por riesgo de suicidio pues la condena de Estados Unidos era exagerada, y fue dejado en libertad.

Actualmente Mckinnon tiene 46 años, sufre el síndrome de Asperger y fue arrestado en el año de 2002 por piratear miles de computadores de la NASA y el Pentágono, con el único fin de buscar información sobre los OVNIS.  
Mckinnon afirmó haber encontrado fotografías, películas y toda clase de evidencias de naves extraterrestres que se mantienen en secreto por las agencias del gobierno estadunidense.

Según Mckinnon lo primero que hackeó fue el Johnson Space Center de la NASA, donde encontró una foto de alta definición de un objeto en forma de cigarro muy grande en el hemisferio norte; luego hackeó los archivos de  la U.S. Space Command y encontró una lista de oficiales que aparecían como no terrestres, es decir, que tenían sus operaciones en el espacio exterior. También encontró una lista de aviones, buscó información sobre ellos y no eran listas de aviones de la armada de Estados Unidos, y lo que vio le hizo creer que eran algún tipo de naves espaciales que cumplían misiones fuera del planeta.

Aquí tenemos evidencia de una de las fotografías encontradas por Mckinnon en lo que parece una nave triangular y que responde a un programa llamado “Solar Warden”, una flota de naves altamente especializada que opera en el espacio exterior y que utiliza tecnología anti gravedad.

Los hallazgos de Mckinnon conciden con las declaraciones del 11 de junio de 1985 de Ronald Regan, en un almuerzo con cinco principales científicos espaciales donde afirma lo siguiente: “Descubrí que la capacidad de la lanzadera es tal, que pondría en orbita 300 personas”, cuando sabemos que un trasbordador espacial mantiene solo un máximo de ocho personas en la órbita de la Tierra y solo cinco fueron construidos con este propósito.
Otro funcionario estadunidense confesó en su lecho de muerte (Ben Rich director de Lockheed en Skunk Works), que los militares estadunidenses habían viajado a las estrellas de forma real, que existían los OVNIS y que el gobierno trabajaba conjuntamente con ellos en el desarrollo de naves espaciales que les había permitido viajar a las estrellas, pero que esta tecnología se encontraba encerrada en proyectos negros y sería necesario una intervención de Dios para que todo esto saliera a la  luz pública, y dijo que cualquier cosa que te puedas imaginar con la mente, ya sabían cómo hacerla, con la ayuda que les han prestado los extraterrestres.

Mckinnon, también encontró información que prueba que la marina de los Estados Unidos se encuentra involucrada en la utilización de tecnología fuera de nuestro planeta Tierra; todo esto sigue corroborando que existe una flota de naves espaciales que no son OVNIS y que pertenecen al “gobierno secreto”, que se encuentra escondida al público, opera bajo la red naval de los Estados Unidos y el comando de operaciones especiales (NNSOC) (Mando espacial naval) y participan más de 300 personas en este programa.

El programa “Solar Warden” está compuesto por contratistas aeroespaciales estadunidenses que hacen partes de proyectos oscuros y que tienen la intervención de gobiernos como los de: Canadá, Reino Unido, Italia, Australia, Rusia, Austria y parece que estos aparatos han sido construidos en bases secretas militares, como el área 51 y en Nevada Estados Unidos.

Parece que la flota de naves espaciales de anti gravedad, comenzó a ser operativa desde el 01 de octubre de 1983 y parece que a partir del 2005 ya tienen construidas ocho naves nodrizas, cada una más grade que dos campos de futbol y 43 naves exploradoras pequeñas y este proyecto se conoce como el “comando espacial naval”; gracias a estas naves ya han podido establecer bases en Marte y la Luna y continúan desde allí la exploración interplanetaria; según los testigos algunas naves de esta flota operativa han salido del Utah y del Área 51 en Nevada.

Un testigo afirma que se encontraba en el desierto profundo de Utah a unos 25 Kilómetros de la carretera más cercana en una zona inaccesible y al momento vio flotar una nave en forma de flecha de un gran tamaño que salió de una puerta gigantesca que se abrió en el desierto.

Una nave que podría tener 180 metros de largo y que podríamos denominar como una nave nodriza que puede albergar en su interior aproximadamente 2000 personas, lo que nos hace suponer que existe la capacidad de crear grandes mega construcciones tanto en el Luna como en Marte corroborando con esto las afirmaciones que han hecho varios testigos que han hecho parte de las agencias secretas y que en el momento se conocen como “delatores”.

Cada vez hay más testigos de personas en el mundo que ven naves moviéndose a gran velocidad y que desafían la gravedad y es difícil diferenciar si son naves extraterrestres o naves del programa “Solar Warden”.

Mckinnon en estos momentos se encuentra en libertad y es uno de los mayores hackers del mundo, que adquirió conocimientos secretos del Pentágono y de la naval de los Estados Unidos que son los principales organismos encargados de desarrollar tecnología secreta, fuera de la mirada de los ojos públicos, pero solo es cuestión de tiempo para que todo esto salga a la luz pública y la humanidad dé un salto cuantitativo en avances tecnológicos.
Aunque estas cosas nos parezcan imposibles de creer y más parezcan cuentos relatados en las películas de ciencia ficción son datos que se encuentran en los periódicos mundiales y es un personaje real que ha tenido que enfrentar un proceso jurídico desde el año 2002 hasta nuestros días; como este hombre se encuentran muchos otros hackers que nos han ido desvelando la misma información; existe tecnología secreta que nos mantienen oculta  y que un día la humanidad debe conocer, para que nos ayude a ser más humanos, es decir, enfrentar el hambre, las enfermedades y también el fantasma de la guerra.

John Henry Builes nos habla de una posible guerra que trasformará toda la humanidad y no volveremos a ser iguales luego de este acontecimiento; estaremos a las puertas de un cambio de modelo económico, político, religioso, cultural y geográfico.

Actualmente vivimos en una sociedad de espaladas a Dios, pero es posible que después de la crisis nos encontremos nuevamente con una humanidad renovada, que sabe que no puede realizar sus proyectos si antes no los ha puesto en manos de Dios.

La tecnología nos puede ayudar para elevarnos material y espiritualmente, pero una tecnología regulada por personas espirituales y maduras afectiva y socialmente; que procuran el bienestar de la humanidad, sin favorecer personas o grupos particulares, sino al contrario buscando el bien de todos y considerando que todo ser humano es importante y no debe ser desechado, como hoy lo hacen muchos grupos de poder e inclusive los gobiernos oficiales.

Considero que falta poco para que todo lo oculto salga a la luz pública y la humanidad tenga que verse enfrentada a un salto cualitativo y cuantitativo, para poder construir un mundo mejor y posible en esta Tierra y para que el amor y la fraternidad surja entre todos y podamos hacer a un lado personas o sistemas que lo único que pretenden es su beneficio personal y convertirse en amos y dominadores de los demás.

Será el momento en el que los seres humanos que viven en las estrellas y los que viven en el interior del planeta nos ayuden a dar el paso para construir una civilización del amor y la prosperidad, aunque no significa que no tengamos que vernos enfrentados a problemas y que nuestra superación como raza humana haya terminado; todavía nos veremos enfrentados a los demonios y a nuestra inclinación al mal que se encuentra en lo profundo de nuestro ser  y es posible, que tengamos que hacer frente a razas que no son humanas y no han sido queridas por Dios y mas bien han salido de la voluntad egoísta y de un acto creador del hombre, que lo asemeja a Dios, pues si en algo el hombre se parece a Dios, es en su capacidad de crear y de hacer este mundo más hermoso y bello, o lo contrario, un mundo desfigurado y dañado.

Este no es más que mi pensamiento, inspirado en las ideas de John Henry Builes.